El verano acaba..., comienza una nueva estación, y a mi me surge una vez más el impulso de repasar, revisar..., reciclar..., y renovar lo que ya no sirve.
En medio de esto me encuentro con objetos, recuerdos, papeles, fotos, emociones varias que me hacen viajar una y otra vez a lugares y tiempos diferentes. Como si de una noria se tratase me encuentro dando vueltas y vueltas..., pero dibujando una espiral..., hacia atrás y hacia delante...con todos los recuerdos...y todos los olvidos.
Esto me hace sentir vulnerable, más de lo habitual, y reconozco que, una vez más, me hace darme cuenta de tantas cosas... De lo que soy, de quién he sido, de todas las transformaciones que han ocurrido... Y de las que tienen aún que venir.
Siento de repente una mezcla entre vértigo y emoción en la boca de mi estómago. Me estiro mientras escribo y hago un esfuerzo por bajar bien mi respiración.
Le digo entonces a mi diafragma: "tranquilo...todo va a ir bien...todo está bien" Y sigo escribiendo, y sigo dándome cuenta.
...Y en ese darme cuenta caen velos... y me siento algo más desnuda..., y también más real...
La foto de arriba pertenece a una sesión hecha en una preciosa cala en la costa de Javea, en Alicante. Era el año 2003..., otoño también...
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